Galleria Estense
Galleria Estense
En el Tríptico de Módena, del que forma parte esta Anunciación, El Greco desea manifestar su admiración hacia los modelos renacentistas italianos y su interés por abandonar el estilo bizantino imperante en Creta. Ese deseo de superación llevará a Doménikos a viajar en 1567 a Venecia para avanzar en su aprendizaje y erradicar definitivamente el bizantinismo de sus obras. Para esta composición empleó como modelo un grabado que reproducía una Anunciación, hoy perdida, de Tiziano, apreciándose un acentuado interés hacia la perspectiva y el dinamismo en las figuras. Sin embargo, el empleo de una luz y un color resplandecientes le sitúan aún en el estilo imperante en Creta así como la factura y el alargamiento excesivo de las figuras. El Greco intenta revelar su originalidad a pesar de las limitaciones, poniendo las bases de su característico estilo, como podemos observar en el rostro de María o en el Rompimiento de Gloria.
ArteHistoria
firmado
Repository/Location: Galleria Estense
http://elgreco.digibis.com/musobjects/2762
3
3A
es
ArteHistoria
Anunciación
Annunciation to Mary
Annunciation to Mary
1567
24 x 18 cm
3D
El Greco
Domenico Theotocopouli
Domenico Theotokopoulos
Domenico Theotokopuli El Greco
Tehocopopuli, Domenico
Δομήνικος Θεοτοκόπουλος
Doménikos Theotokópoulos
**Doménikos Theotokópoulos**, en griego Δομήνικος Θεοτοκόπουλος (Candía, 1541 – Toledo, 1614), conocido como **el Greco** («el griego»), fue un pintor del final del Renacimiento que desarrolló un estilo muy personal en sus obras de madurez. Hasta los 26 años vivió en Creta, donde fue un apreciado maestro de iconos en el estilo posbizantino vigente en la isla. Después residió diez años en Italia, donde se transformó en un pintor renacentista, primero en Venecia, asumiendo plenamente el estilo de Tiziano y Tintoretto, y después en Roma, estudiando el manierismo de Miguel Ángel. En 1577 se estableció en Toledo (España), donde vivió y trabajó el resto de su vida. Su formación pictórica fue compleja, obtenida en tres focos culturales muy distintos: su primera formación bizantina fue la causante de importantes aspectos de su estilo que florecieron en su madurez; la segunda la obtuvo en Venecia de los pintores del alto renacimiento, especialmente de Tiziano, aprendiendo la pintura al óleo y su gama de colores —él siempre se consideró parte de la escuela veneciana—; por último, su estancia en Roma le permitió conocer la obra de Miguel Ángel y el manierismo, que se convirtió en su estilo vital, interpretado de una forma autónoma. Su obra se compone de grandes lienzos para retablos de iglesias, numerosos cuadros de devoción para instituciones religiosas -en los que a menudo participó su taller- y un grupo de retratos considerados del máximo nivel. En sus primeras obras maestras españolas se aprecia la influencia de sus maestros italianos. Sin embargo, pronto evolucionó hacia un estilo personal caracterizado por sus figuras manieristas extraordinariamente alargadas con iluminación propia, delgadas, fantasmales, muy expresivas, en ambientes indefinidos y una gama de colores buscando los contrastes. Este estilo se identificó con el espíritu de la Contrarreforma y se fue extremando en sus últimos años. Actualmente está considerado uno de los artistas más grandes de la civilización occidental. Esta alta consideración es reciente y se ha ido formando en los últimos cien años, cambiando la apreciación sobre su pintura formada en los dos siglos y medio que siguieron a su muerte, en que llegó a considerarse un pintor excéntrico y marginal en la historia del arte.
1560
1614
1028
1541
1614
1541
1614
Galleria Estense
1124
1884
La Galería Estense es el gran museo de bellas artes de Módena (Italia), heredero de las colecciones de los antiguos duques de la Casa de Este, que gobernaron durante el Renacimiento los ducados de Ferrara y Módena. Este museo tuvo su primera sede en el Palacio Ducal y fue trasladado en el siglo XIX a un sector del llamado Palacio de los Museos de la misma ciudad. Entre sus tesoros se cuenta el Tríptico de Módena, obra clave juvenil de El Greco, y el Retrato del duque Francisco I de Velázquez.
1884
Local
Obras del Greco
Works by El Greco
1567-1570: Venecia
1567-1570: Venice
La etapa veneciana (1567-1570) la pasó estudiando a Tiziano, Tintoretto, Veronés y Bassano. Desarrolló un estilo ecléctico, que revela que asimiló los elementos escenográficos, el dibujo, el color, la luz, los escorzos y el dramatismo de la Escuela veneciana. De estos años destacan Curación del ciego (1567) y La huída a Egipto (1570). En su viaje a Roma se detuvo en Parma, donde estudió las obras de Corregio y Parmigianino.
Pintura
Painting
The Annunciation
La Anunciación
La representación de la anunciación es uno de los temas más populares del arte cristiano, encontrando paralelo solamente en las imágenes de la Virgen con el niño y de la crucifixión. El episodio es narrado tanto en texto canónicos como en libros apócrifos. Según la narrativa del Evangelio de Lucas (1, 26-48), el arcángel Gabriel fue enviado por Dios para anunciar a María, esposa de José, descendiente de la casa de David, que ella sería la madre de Jesús, «Hijo de Dios»:4 No temas, María, porque Dios te ha favorecido. Concebirás y darás a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús; él será grande y será llamado Hijo del Altísimo. El Señor Dios le dará el trono de David, su padre, reinará sobre la casa de Jacob para siempre y su reino no tendrá fin. Frente a un cuestionamiento de María («¿Cómo puede ser eso, si yo no tengo relaciones con ningún hombre?»), a lo que el ángel replica: «El Espíritu Santo descenderá sobre ti y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra. Por eso el niño será Santo y será llamado Hijo de Dios. También tu parienta Isabel concibió un hijo a pesar de su vejez, y la que era considerada estéril, ya se encuentra en su sexto mes, porque no hay nada imposible para Dios», María dijo entonces: «Yo soy la servidora del Señor, que se cumpla en mí lo que has dicho». Y el Ángel se alejó.4 La iconografía de la anunciación surgió en el Oriente Medio, donde la fiesta de Nuestra Señora de la Anunciación es conmemorada desde al menos el siglo V, extendiéndose en seguida por todo el mundo cristiano.4 La representación tradicional trae a María posicionada a la derecha y al ángel posicionado a la izquierda del observador, con Gabriel asumiendo la postura de que habla y la Virgen lo escucha y acepta. María era indistintamente representada como una simple mujer, muchas veces costurando un paño, simbolizando, de acuerdo con el Evangelio de Juan (10:1) al «tejido del velo del Templo». El ángel era representado en postura erecta, con un semblamente inequívocamene masculino, a veces, extendiendo su mano derecha hacia la Virgen. Con el paso de la Edad Media, la representación del episodio se fue volviendo gradualmente más compleja, desde la elaboración de la indumentaria de María y del ángel, hasta la inclusión de símbolos místicos, como ramos de lirio, o bien un recipiente con agua, símbolos de la pureza.4 5 En el siglo XII, se volvió habitual la representación de la Virgen de la Anunciación sosteniendo la biblia en sus manos, como una premonición de su propio destino. Se integraron en la iconografía la paloma blanca o una luz divina, simbolizando al Espíritu Santo. En el sur de Europa, era frecuente la ambientación de la escena en jardines y palacios, al punto de que los artistas del norte prefirieron retratar el episodio en ambientes domésticos o eclesiásticos. Ya en el Renacimiento, se volvió común la substitución de la biblia por un libro de horas. La Virgen ya no fue representada solamente en actitud de resignación, sino más bien sorprendida por la vista del ángel. El dramatismo de este acto, del efecto visual más efectivo, fue continuamente explorados por los artistas del Manierismo y del Barroco. La iconografía se volvió menos rígida, dando a los artitas cierta «libertad inventiva».4 5 En este último contexto se sitúan las múltiples representaciones del episodio hechas por El Greco, a pesar de que sus obras a menudo hacen uso de ciertos atributos de la iconografía medieval, especialmente en su aspecto bizantino.
La representación de la anunciación es uno de los temas más populares del arte cristiano, encontrando paralelo solamente en las imágenes de la Virgen con el niño y de la crucifixión. El episodio es narrado tanto en texto canónicos como en libros apócrifos. Según la narrativa del Evangelio de Lucas (1, 26-48), el arcángel Gabriel fue enviado por Dios para anunciar a María, esposa de José, descendiente de la casa de David, que ella sería la madre de Jesús, «Hijo de Dios»: No temas, María, porque Dios te ha favorecido. Concebirás y darás a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús; él será grande y será llamado Hijo del Altísimo. El Señor Dios le dará el trono de David, su padre, reinará sobre la casa de Jacob para siempre y su reino no tendrá fin. Frente a un cuestionamiento de María («¿Cómo puede ser eso, si yo no tengo relaciones con ningún hombre?»), a lo que el ángel replica: «El Espíritu Santo descenderá sobre ti y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra. Por eso el niño será Santo y será llamado Hijo de Dios. También tu parienta Isabel concibió un hijo a pesar de su vejez, y la que era considerada estéril, ya se encuentra en su sexto mes, porque no hay nada imposible para Dios», María dijo entonces: «Yo soy la servidora del Señor, que se cumpla en mí lo que has dicho». Y el Ángel se alejó. La iconografía de la anunciación surgió en el Oriente Medio, donde la fiesta de Nuestra Señora de la Anunciación es conmemorada desde al menos el siglo V, extendiéndose en seguida por todo el mundo cristiano.4 La representación tradicional trae a María posicionada a la derecha y al ángel posicionado a la izquierda del observador, con Gabriel asumiendo la postura de que habla y la Virgen lo escucha y acepta. María era indistintamente representada como una simple mujer, muchas veces costurando un paño, simbolizando, de acuerdo con el Evangelio de Juan (10:1) al «tejido del velo del Templo». El ángel era representado en postura erecta, con un semblamente inequívocamene masculino, a veces, extendiendo su mano derecha hacia la Virgen. Conel paso de la Edad Media, la representación del episodio se fue volviendo gradualmente más compleja, desde la elaboración de la indumentaria de María y del ángel, hasta la inclusión de símbolos místicos, como ramos de lirio, o bien un recipiente con agua, símbolos de la pureza. En el siglo XII, se volvió habitual la representación de la Virgen de la Anunciación sosteniendo la biblia en sus manos, como una premonición de su propio destino. Se integraron en la iconografía la paloma blanca o una luz divina, simbolizando al Espíritu Santo. En el sur de Europa, era frecuente la ambientación de la escena en jardines y palacios, al punto de que los artistas del norte prefirieron retratar el episodio en ambientes domésticos o eclesiásticos. Ya en el Renacimiento, se volvió común la substitución de la biblia por un libro de horas. La Virgen ya no fue representada solamente en actitud de resignación, sino más bien sorprendida por la vista del ángel. El dramatismo de este acto, del efecto visual más efectivo, fue continuamente explorados por los artistas del Manierismo y del Barroco. La iconografía se volvió menos rígida, dando a los artitas cierta «libertad inventiva».4 5 En este último contexto se sitúan las múltiples representaciones del episodio hechas por El Greco, a pesar de que sus obras a menudo hacen uso de ciertos atributos de la iconografía medieval, especialmente en su aspecto bizantino.
Pintura al óleo
Oil painting
Pintura al óleo
Tabla
Soporte de madera rectangular, plano, de mayor largura que anchura, empleado en ebanistería, construcción, así como para otros trabajos artesanales. Ha sido a uno de los principales soportes pictóricos, hasta su sutitución por el lienzo. Las tablas, habitualmente, se unían para formar paneles de tamaño más grande. El tipo de madera y su corte en relación al eje del tronco del árbol determinan sus características específicas e, incluso pueden aportar datos sobre su uso histórico según épocas o escuelas. En España las tablas más empleadas eran las de madera de pino y de algunas maderas blandas. Los italianos emplearon tablas gruesas de madera de álamo, de ciprés, de de chopo y de peral, aunque los pintores venecianos parece que preferían la madera de abeto. Los primitivos flamencos utilizaban tablas finas de madera de roble muy bien curadas. En Alemania se emplearon la madera de pino, de abeto, de tilo de haya y otras
Tabla